lunes, 5 de enero de 2015

Hungría: otro país a la lista negra

Hungría y el  gaseoducto South Stream

Recientemente les comentaba que en la guerra económica de Washington y Londres contra Rusia, y también contra Europa, estaba la intención de aislar Europa occidental de la Federación Rusa. Para ello han provocado el derrocamiento del gobierno democrático del presidente ucraniano Yanukovich y han instalado, mediante el uso de la violencia utilizando al fascismo remanente en Ucrania y en Europa, un régimen que trabaja para los intereses extranjeros, no por los intereses reales de los ucranianos. 

Ucrania: el retorno del fascismo a Europa



Este golpe de Estado real en Ucrania no solo no es bueno para los ucranianos, que ya lo están empezando a sufrir al caer sobre ellos todos los vampiros de la economía de las corporaciones occidentales, sino que no es bueno tampoco para los países occidentales de Europa. Muchos de estos países ya han reaccionado ante esta encerrona tendida por el poder anglosajón, uno de ellos es Hungría.
Hungría, con la presidencia de Viktor Orban, que llegó  de nuevo al poder en mayo de 2010, tras haber estado antes de 1998 a 2002, ha llevado a cabo una serie de medidas y actuaciones en su segunda presidencia que no han gustado al poder económico occidental. Medidas que se califican con el falso y engañoso titular de "antieuropeas", es decir, que lo que no satisface los intereses del mundo corporativo occidental es "antieuropeo". Basta recordar un poco de geografía básica para ver que Hungría, los Balcanes, buena parte de Rusia o Bielorrusia forman parte de Europa tanto como España, Francia o Alemania, independientemente de las políticas que sigan.
Entre estas medidas estuvo su actuación contra los intereses de Monsanto, la poderosa multinacional que tiene gran control sobre el Gobierno de los Estados Unidos y del que recibe tratos de privilegio, al actuar contra los cultivos modificados genéticamente, como el maíz, tan extendido en lugares como la Navarra española.
Hungría ha adoptado una posición firme contra el gigante de la biotecnología y la modificación genética Monsanto, destruyendo 1.000 acres de maíz que se había descubierto que procedía de semillas modificadas genéticamente, de acuerdo al Subsecretario de Estado del Ministerio de Desarrollo Rural Lajos Bognar. A diferencia de muchos países de la Unión Europea Hungría es una nación donde las semillas modificadas genéticamente están prohibidas. 1
Antes de este cambio, en el mandato presidencial anterior, como favorecía a los intereses de las corporaciones occidentales, era adulado y premiado:
El propio Orban ha recorrido un largo viaje político desde  que fuera elegido como  el segundo de los Primer Ministros más joven de Hungría en 1998. En aquel entonces Viktor Orban supervisó la entrada de Hungría  junto con la de Polonia y la República Checa en la OTAN, a pesar de la protesta de Rusia, y en la Unión Europea. Como Primer Ministro durante unos tiempos mucho más prósperos en la UE, Orban redujo impuestos, abolió el costo de la matrícula para los estudiantes cualificados, incrementó los beneficios por maternidad y atrajo a la industria alemana con la mano de obra barata húngara. Uno de sus "consejeros" estadounidenses fue James Denton, vinculado con Freedom House, una ONG implicada en revoluciones de colores. Orban parecía el predilecto de los neocons de Washington.  En 2001 recibió el Premio de la Libertad del neoconservador American Enterprise Institute. 2
Tras la postura de Orban de atender a los intereses de Hungría defendiendo el suministro energético más racional y económico, desde Rusia, que aborta el veto de Washington a Moscú, la demonización del Gobierno húngaro en los medios de comunicación no ha hecho sino dispararse. Ya antes de esto, tras su segunda victoria, había sido acusado por Daniel Cohn-Bendit, de los Verdes europeos, de querer implementar un modelo como del de Hugo Chávez para Hungría. 2 Una vez que Estados Unidos había conseguido evitar que Ucrania fuese ese nexo de unión entre Rusia y la Europa de occidente, se planteó una vía alternativa, la South Stream, que iría a través del Mar Negro hacia Bulgaria y de aquí, a través de Serbia o Grecia, a la propia Hungría, Austria o Italia y otros países. Washington presionó a Bulgaria, obteniendo de momento frutos, pero no todos los países que iban a ser beneficiarios se sometieron al chantaje norteamericano. Así, Hungría junto a Austria decidieron seguir con su plan energético en el proyecto South Stream. La poderosa prensa occidental reaccionó con contundencia y rapidez ante tal hecho, mostrando su verdadera naturaleza impositiva y su verdadero propósito, el de servir a los intereses de las corporaciones. Esto decía el New York Times en una de sus editoriales:
La más reciente expresión de desprecio de Hungría por la Unión Europea es la aprobación de una ley el lunes que despeja el camino al gaseoducto South Stream de Rusia de gas natural para atravesar Hungría. La nueva ley es una clara violación de la petición del Parlamento Europeo en septiembre a los estados miembros para cancelar el South Stream y de las sanciones económicas contra Rusia impuestas por la Unión Europea y los Estados Unidos después de las acciones de Rusia en Ucrania.
En lugar de emitir gestos tibios de preocupación por las políticas antidemocráticas, la Unión Europea debería estar moviéndose para sancionar a Hungría. Jean-Claude Juncker, el presidente de la Comisión Europea, debería ejercer su poder para forzar al Sr. Navracsics a dimitir. Si no se toman medidas contra el Gobierno de Orban sería abdicar de los valores que constituyen la fundación de la Unión Europea.  3
Esta editorial es un claro ejemplo del verdadero carácter de la prensa corporativa. Tratan de imponer mediante la fuerza los intereses de las corporaciones económicas privadas sobre las decisiones de los estados soberanos elegidos democráticamente.
La posición del presidente húngaro de que Washington está instigando una nueva Guerra Fría contra Rusia y de que no iban a participar en esta, lo ha situado como un enemigo de cara a los dirigentes estadounidenses. Ahora se ceban con Hungría, buscando casos de corrupción como excusa. Pero resulta que el Gobierno estadounidense es el peor ejemplo de administración limpia, en ella abunda la corrupción y en grado mayor y con mayor gravedad los enormes crímenes que han ido provocando por el mundo durante el presente y el último siglo. 4
En realidad, el Gobierno de los Estados Unidos es también muy corrupto, y utiliza los cargos de corrupción contra funcionarios de otros países con el fin de proporcionar un pretexto para obligarlos a ceder a la aristocracia norteamericana -para convertirse en naciones vasallas-. ¿Establecerá el Gobierno de EE.UU.  prohibiciones de entrada contra altos funcionarios estadounidenses también, tales como Joe Biden, incluso ahora, y quizás contra Barack Obama después de que finalice su presidencia y él comience a recibir favores que son ampliamente esperados que reciba, en y desde Wall Street (tal y como hizo su amigo Timothy Geitner)? (Y esto era ya después de la cascada de corrupción durante la presidencia de George W. Bush -a ninguno de los cuales Obama permitió ser investigado y juzgado-).
En 2013 una encuesta de Gallup preguntó a los estadounidenses: "¿está la corrupción generalizada en el Gobierno de los Estados Unidos?", y un  73 % dijo que "sí". Pero la Administración corrupta de Obama pretende estar en la posición de árbitro internacional contra la corrupción en otras naciones corruptas. ¿A quién está tomando el pelo? 4
El mayor de los corruptos pretende ser árbitro, juez del juego de la corrupción de la que ellos son los mayores infractores. ¿Les van a tomar a ustedes también el pelo otra vez con esta nueva campaña? Y mira que están recientes unas cuantas campañas de estas fraudulentas de similar tipo, que ahora verán, si Hungría no se pliega al chantaje, en sus televisores y diarios. Empujadas, eso sí, por ONGs que defienden la "libertad" y los "derechos humanos", es decir, los intereses políticos y económicos de esta oligarquía occidental tan poco presentable como poco ejemplar.

PS:
Campañas fraudulentas recientes:
Navalny y la oposición "rusa"
Hong Kong, otra revolución de color

Cómo Washington intenta medrar en Asia y Europa (y en todo el mundo) utilizando las ONGs:

Washington is Going to Rely on NGOs in Central Asia


First appeared:http://journal-neo.org/2014/11/21/hungary-s-viktor-orban-washington-s-new-enemy-image/

Notas:
1. Anthony Gucciardi. Hungary destroys all Monsanto GMO corn fields. Natural Society. 20.09.2011. 
2. William Engdahl. Hungary´s Viktor Orman: Washington´s new enemy image. New Eastern Outlook. 21.11.2014.
3. Hungary´s dangerous slide. The New York Times. 5.11.2014.
4. Eric Zuesse. U.S. war against Russia is now against Hungary too. Information Clearing House. 26.12.2014.
5. Mikel Itulain. Estados Unidos y el respeto a otras culturas y países. Libertarias. 2012.

2 comentarios:

  1. Me ha sorprendido la independencia y coraje del señor Orban. Pronto intentarán derrocarlo. Despreciable como siempre el señor Cohn Bendit, un criptosionista, filopedófilo y disfrazado de "verde".

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Él se está comportando como debe hacerlo un presidente de un país, defendiendo los intereses generales de este, no los particulares propios y los particulares extranjeros.
      Los verdes en Europa, buena parte de estas organizaciones que se apodan ecologistas, como el mismo Equo, tienen un mal historial en el tema de la paz y el respeto a los demás, ya lo vimos con el apoyo a la guerra de Yugoslavia y a las que vinieron después.

      http://miguel-esposiblelapaz.blogspot.com.es/2012/11/el-mal-ejemplo-de-democracy-now-y-de-la.html

      http://www.workers.org/ww/1999/antiwar0603.php

      http://www.wsws.org/en/articles/2014/03/22/germ-m22.html

      Eliminar

Puede poner aquí sus opiniones, siempre con respeto y con ánimo de enriquecer y fomentar el debate.
Las personas que participen deberán identificarse con el fin de que asistamos a un debate e intercambio de opiniones en condición de igualdad.
Gracias-Mila esker-Thank you.